miércoles, 16 de junio de 2010

POEMAS OCULTOS DE JIM MORRISON


















LOS BLUES.

Oh, ¿cómo fue posible que me hicieras esto a mí?
Dios, Testigo del gran
bailarín, tú eres un sátiro disfrazado
Así cruel e inútilmente
Tuerces mi vida
Descansaré aquí, robado, en el frío viento,
en el camino, hasta que la paz me cubra
de hielo,
y me santifique.
Grosero fantasma bastardo
¡Ah!, ¿quién viene ahora?



















ESTAR SOLO


Estar solo
y observar el alba
Podría originar
una canción tonta
Sobre una muchacha
que conocí
Era la estrella
del show del lado perdido
Ella no era yo
Ella no era tú
Créeme
Sabía qué hacer
y decirle a un hombre que
estaba en las últimas:
“Eh, Hombre elegante
y guapo, habrá un cambio
en el clima”
Entonces, ¿qué se supone
que debo hacer?
Simplemente sentarme solo
y mascar mi zapato
Necesitaba un amor
No más que ella
y sin embargo no menos
y sin remordimientos



















LA RAMERA SALVAJE RÍE.


La ramera salvaje ríe
como una antigua solterona
Vieja, te vemos, vuelve
a la mente
Yazgo como afiebrado
Bailando tu silencio núbil
deseando ser poseído
historias no dichas
que los indios se atrevan a alzarse
Pisoteados, como pieles rojas
sagrado prepucio
El cáncer comenzó c/el cruel golpe
del cuchillo y la vara
dañada se ha erguido de nuevo
en el Este
como una estrella
incendiada














UN VELORIO
Un velorio
Sacude sueños de tu cabello
Mi niña hermosa, mi dulce
Elige el día, y el signo
de tu día,
lo 1° que veas.
Un árbol quemado, como un gigantesco
pájaro primitivo, una hoja,
seca y amarga, crepitantes historias
en sus ondas cálidas.
Los dioses de la acera lo harán por ti.
La selva del vecindario,
El vacío museo perdido, y
La mesa, y el monte preñado
con su Monumento, encima del puesto de revistas
donde se esconden los niños
Cuando termina la escuela.

No hay comentarios: